Pues bien, precisamente en el primero de los ámbitos he tenido oportunidad de observar que, al felicitar, animar, motivar... a un alumno o alumna en su muro de Facebook u otra red social que utilice, el efecto positivo que buscamos generar se triplica, y paso a detallar las razones:
- El hecho en sí mismo, y que sirve de valoración para la propia persona, reconociendo el trabajo, el esfuerzo, el tiempo que ha dedicado...
- El acto público de la comunicación, ya que no es lo mismo felicitar a nivel privado (con un mensaje) que en un lugar donde los demás puedan enterarse también (muro).
- Y por último, el reconocimiento y el confort proveniente del círculo social de amigos/conocidos (que puede coincidir en parte o no con sus compañeros de clase) del alumno por la empatía que genera la propia red.
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